El Ejército de Liberación de Kosovo, mesnada de terroristas musulmanes nutridos con el narcotráfico y las ayudas Estados Unidos, ha declarado unilateralmente la independencia de esa provincia serbia. Un paso más del proceso de disgregación y vergonzoso fracaso a que representa Eurolandia.
Todo ello arranca del empeño germano, al que se unió el Vaticano, en conseguir la separación de la católica Croacia. Con ello abría una senda de despiece de
Que nadie invoque la legalidad internacional en toda esta cuestión. La devastadora intervención yanqui no contó con el visto bueno del Consejo de Seguridad de
En 1999 las fuerzas y poblaciones de la antigua República Federal Yugoslava fueron bombardeadas por
Sólo los intereses de los Estados Unidos, que incluyen la instalación de una poderosa base militar, explican que los narco-terroristas musulmanes de Kosovo se atrevan a proclamarse Estado independiente. Alemania se refugia por ahora en la ambigüedad, pero la mayoría de sus cipayos de Eurolandia se pliegan a la independencia de Kosovo e incluso piensan contribuir a ella con una “misión civil”. En los hechos, el “Kosovo independiente” no será más que un protectorado yanqui de mayoría musulmana, dominado por las mafias y la corrupción, y con algunos observadores europeos… de la persecución de los serbios.
Provoca pasmo el plan estudiado en
La verdad es que con esa independencia, los Balcanes vuelven a entrar en erupción. Sólo es cuestión de tiempo que los serbios de Bosnia y Herzegovina planteen su derecho a ser tratados como los kosovares. O que éstos pretendan unirse a Tirana, para expandir
Pero hay que ir más lejos. Corresponde al presidente ruso, Vladimir Putin, el mérito de haber puesto a Eurolandia ante sus propias contradicciones en este asunto, recordando que en la guerra de 1999 las atrocidades se cometieron por los dos bandos y que apoyar el separatismo albano-kosovar constituye un precedente muy peligroso para países, como la propia España, que sufren también tensiones secesionistas.
Los separatistas vascos y catalanes no han tardado un segundo en arrimar el ascua a su sardina. No en vano su base teórica es exactamente la misma que la del secesionismo albano-kosovar: el criminal nacionalismo étnico, manifestación de la barbarie propia del periodo imperialista que vivimos.
Por el momento, el gobierno de Zapatero ha manifestado su rechazo a la declaración unilateral de independencia por parte de los albano-kosovares. Pero las palabras no han venido acompañadas de retirada inmediata de nuestras tropas del territorio.
El Partido Nacional Republicano no tiene la menor duda de que, en cuanto pasen los comicios del 9-M, tanto el PP como el PSOE acabarán reconociendo a Kosovo como nación milenaria. El PP, a rastras de los USA. Y el PSOE, a rastras de las grandes potencias de Eurolandia, para no quedarse cada vez más en su furgón de cola. ¿Alguien puede creer que quien ocupe el próximo gobierno de España, sea Zapatero o Rajoy, se enfrentará a los líderes europeos y a Washington a la vez? Ahora están mintiendo como bellacos. Si dicen que no reconocerán a Kosovo es por puro electoralismo: para no ser acusados de sentar un inequívoco precedente para la independencia del País Vasco y de Cataluña.
Pero la puerta abierta en Kosovo ha sentado ese precedente de modo irremediable. ¿Bombardearán algún día Madrid los USA para defender a los separatistas vascos, catalanes o gallegos? En cualquier caso, está claro lo que hará Eurolandia: reconocer como Estados a Cataluña, País Vasco, o Galicia será cosa de cada estado miembro de
¡Yanquis, idos a casa!
¡No a
¡Kosovo es el corazón de Serbia!
¡Fuera tropas españolas de los Balcanes!